lunes, 20 de abril de 2015

Lo que se escucha si pones al revés una canción de Sabina

Fue en un pueblo sin mar una noche después de un concierto.

Quienes gusten de inflar en cantidades industriales entenderán los siguientes escenarios o mentiras, como quieran llamarles:

1.- Ya no voy a tomar.
2.- Nomás dos.
3.- Al chile no me acuerdo.

Hay lugares del mundo que tienen la característica de que todos sus días y todas sus noches siempre están cerveceras; coincide que he estado en esos lugares y donde haya estado y no es cervecero, se vuelve; soy como un embajador de Unicef, pero del mame. ¡Es todo un compromiso!

El viernes 5 de julio del 2013 me amaneció cerca de las 15:20. Encontré que mi ropa y mi aliento expedían el mayor simulacro de cenicero que la humanidad jamás haya visto, la cabeza -la que se supone que piensa- me retumbaba más que un pinche bombo en medio de La 12 en pleno juego contra las gallinas; un desfile de 200 granjas de hormigas imaginarias por todo el cuerpo, temblaba más que pinche gelatina y una sed de la chingada, pero sed de agua no de más cagada; entonces dije: "ya no voy a tomar".

El sábado 6 de julio del 2013 me amaneció como a las 11, pero ahora por huevón y con la novedad de que estaba entero sin dolores, sin hormigueos, sin temblorina, sin sed y sin apestar a cigarro.

Omitiré nombres para no empinar raza, pero les anticipo que participaron varios sujetos a los cuales mencionaré por número y acorde al orden de aparición. NOTA: los involucrados recordábamos muy poco y se precisó de la ayuda de varias personas para poder armar esta historia.

Me amaneció como a las 11. Por ahí de las 13 fui a casa del sujeto 1 para ir a comer y eso hicimos, pero el sujeto 1 andaba en condiciones parecidas a las que presentaba yo el día anterior -quitando lo del cenicero-. Fuimos a tragar al tributo jarocho o una mamada así, seguro es que es de comida veracruzana, y saliendo el sujeto 1 dice que necesita un clamato porque andaba bien crustáceo.
Justo en contraesquina del restaurante se ubica una tienda de conveniencia y hacia allá nos dirijimos a comprar lo necesario para armar el milenario brebaje curativo, pero estaban unas edecanes promocionando el 6 de no recuerdo qué cerveza, pero el caso era que por 50 bolas te daban la bironga y la entrada al Corona Fest. El diálogo fue el siguiente:

* Sujeto 1.- Wey, vamos al Corona.

* Yo.- ¿Qué grupos van a estar?

* Sujeto 1.- Liquits, DLD, Gusana Ciega, Víctimas y Caifanes.

* Yo.- Al chile no me llama la atención.

* Sujeto 1.- ¡Vamos we! Yo te pago el boleto.

* Yo.- Ok.

Regresamos a su casa, prepara su menjurge y le digo:
"¿Sabes qué? No te voy a dejar tomar solo. Eso no es de compas. Me tomo nomás dos". Volví a tomar.

La logística para el evento era la siguiente:
Íbamos a mi casa donde estaría sujeto 2 con su novia y llegarían sujeto 3 y su amigo sujeto 4, de ahí nos trasladaríamos en carros a casa del sujeto 4 porque vive muy cerca de la estación del metro y el festival sería en un terreno que está a un costado de donde termina una de las líneas del metro y ahí dejaríamos los carruajes; después andaríamos en el evento, se terminaría y listo.

Llegamos a casa y me tomo la segunda de las "nomás dos", ahí estaban sujeto 2 y su novia, a los pocos minutos llegaron sujeto 3 y sujeto 4 y continuamos con el plan; dejamos los vehículos, arribamos a donde el evento. El primero en entrar fui yo y me recibe un tipo -este no lo nombraremos sujeto- con una mochila-recipiente hasta el tronco de cheve y me deja sin argumentos: "¿Quieres cheve? Está a 35 pesos el litro", no pos no mames; ¡Dios quiere que mame cual becerro!

Maratónica jornada donde en algún punto, por hueva y por no perder de vista a la raza, comenzamos a mear en vasos y aventárselos a la gente, ¡y no me juzguen! A huevo si han ido a conciertos les ha tocado baño dorado, tons había que regresar un poco a la vida lo que nos ha dado. Otro pedo fue que es pura pinche tierra ese lugar y de pronto entró una puta pipa a aventar agua y al sujeto 3 y a mí nos pareció adecuado hacerle frente y danzar. Resultado = Todos empanizados.

Según estábamos esperando a Víctimas, pero como salió Caifanes asumimos que habían tocado temprano así que nos fuimos sujeto 1, sujeto 3, sujeto 4 y yo; sujeto 2 y su novia ya se habían ido a lo oscurito. Tomamos un taxi, sujeto 3 se fue de copiloto, atrás de él iba sujeto 1, en medio sujeto 4 y yo detrás del conductor; por alguna razón me pareció un buen detalle agarrarle los tostones al chofi que creo que se llamaba... bueno, dije que sin nombres.
Ya aproximándonos a casa de sujeto 4, sujeto 1 le dedica su mejor colección de piropos a unas damas que, por módicas cantidades, aflojan el tamal; como nos tocó hacer alto tuvimos que exigirle al conductor que omitiera el carmesí del semáforo pues seguramente el departamento de RH y administración donde laboran las mujeres recién aduladas no vería con agrado el mensaje contenido en las observaciones del sujeto 1; es decir, le chingamos al chofi para que se pasara el rojo por culos a que saliera el padrote y nos atorara.

Llegamos a casa de sujeto 4 donde él decidió no continuar y con justa razón ya que él NO toma y no creo que haya sido divertido aguantarnos.

Nos fuimos a casa de sujeto 1 para que se cambiara de ropa porque nos dirigíamos a una fiesta; ahí su roomate, sujeto 5, fue convencido de acompañarnos porque le garantizamos la presencia de bellas damas.

Antes de llegar a la fiesta pasamos por cerveza y whisky. Yo iba manejando.

Llegamos al lugar y nos recibe sujeto 6, sujeto 3 baja con la cerveza y la desparrama en el pavimento; sujeto 1 baja con su whisky, sujeto 5 sigue cagado de risa porque antes de llegar tomamos una calle que no era y que estaba toda empedrada y le metí pata, lo que provocó su asombro y su decisión de sugerirme que no mamara y cuidara mi carro, pero al enterarse que el auto no era mío, comenzó su ataque de risa; yo desciendo del coche y empiezo a patear las latas que desparramó sujeto 3, incluso una golpea otro vehículo y sujeto 6 me dice: "¡No mames cabrón!", y yo le pregunto: "¿Es tuyo?", y él responde: "No", y yo le digo: "Entonces no estés mamando".

Entramos, sujeto 1 muy canchero y galán, por saludar a las guapas señoritas que prometimos a sujeto 5 que estarían, suelta la bolsa que contenía su botella de whisky y la manda a la mierda, pero más allá de alterarse, dijo: "No hay pedo, compro otra". ¡El verga y buenas!

Cabe mencionar que la frase del momento era: "¡Cállese pinche perro!".

El único entero era sujeto 5. Sujeto 1 -ya con la nueva de whisky- se estaba mamando como campeón, sujeto 6 leve, yo andaba hasta el riel y sujeto 3, al ver que las damitas presentes le entraban muy convencidas al karaoke, estaba repitiendo cada vez más fuerte la frase del momento obviamente conjugada para el género de ellas. Sujeto 6 nos aconseja que calmemos al 3 porque la está cagando, le hicimos caso y media hora más tarde decidimos partir.

El éxodo pintaba sin contratiempos sino es porque sujeto 3 desapareció, igual asumimos que se fue a su casa e hicimos lo propio.

Domingo 7 de julio del 2013 me amanece peor que cenicero, temblorina, hormigueo, sed, un severo dolor de chompa y 3 comentarios:

1.- Ahora sí ya no vuelvo a tomar.
2.- Y había dicho que nomás dos.
3.- No me acuerdo de ni verga.

Nos dieron las 10 y las 11, las 12 y la 1 y las 2 y las 3... ¡las pinches 3! A las 3 de la tarde me llama sujeto 1 diciendo que también tiene un severo dolor de cabeza y preguntando por sujeto 3 que porque no lo encuentra. Cabe mencionar que sujeto 1 y sujeto 3 son primos.
Yo tenía que trabajar. Llegué al trabajo a las 4 y a las 5 me llama sujeto 1 para decirme que gracias a sujeto 2 y su novia hallaron a sujeto 3... ¡en el tambo!

Sujeto 1 no recuerda mucho, sujeto 2 y su novia agarraron coto tempra, sujeto 3 también trae severo dolor de chompa y también recuerda poco.
Sujeto 4 le cuenta a sujeto 3 que cuando íbamos saliendo del festival, él -o sea sujeto 3- le mete un chingazo a sujeto 1, sujeto 1 piensa que fui yo y me mete un chingazo, a mí no me parece y le regreso el chingazo, me da otro, le regreso otro y así hasta que sujeto 3 confiesa, sujeto 1 le mete un chingazo, sujeto 3 se lo regresa y así nos fuimos un tramo. Resultado = Los 3 pendejos con dolor de choya.

Sujeto 5 y sujeto 6 nos proporcionan la parte de la historia que ocurrió entre casa de sujeto 1 y sujeto 5 y la fiesta.

Sujeto 3, luego de que se le pidió que no mamara y que se chingó un vergo de salchichas, se agüitó y se fue creyendo que estaba cerca de su casa, lo trepó la chota, no traía dinero, se quedó sin batería su cel, conoció a La Thalía -un jotito-, hizo talacha, lo encuentran sujeto 2 y su novia, fueron por él y apestaba bien culero.

Fue en un pueblo sin mar una noche después de un concierto.


2 comentarios:

  1. * YA NO VOY A TOMAR.. (TE LEÍ DECIR ESO MAS DE UNA VEZ).. HAHAHA "PERO UNA VEZ QUE TOMO TENGO QUE HACERLO BIEN"
    ME DIO GUSTO LEER TUS ESCRITOS, MUY CHIDOS... FALTO UNO DE INVIERNO EN ARGENTINA.. O ALGO ASÍ :) ... QUE ESTES BIEN.. DEJARE UNA BELLA FRASE POR AQUI.. NETA EXCEDES LOS LIMITES DE LA AMISTAD.. JAJAJA BYEEE

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