ausencia de figuras, pérdida de otras,
lóbregos pasajes que cesaron de golpe
despedidos entre contrastes de vida.
Sean cuales sean, hay cuestiones
que siempre hay modo y tiempo para hospedarlas;
cuestiones que a todos nos atañen y
de las cuales jamás hay registros.
Esta situación es también una condición,
que atiende a cada quien con autenticidad,
que exhibe a nuestra facultad cognitiva
como un recoveco renuente y vapuleado.
Ahora bien, todo individuo puede hallar alternativas:
naufragar en una tempestad pronosticada o
repentina, puede ignorar e ignorar, o bien
puede reflexionar y seguir.
Puede anclarse a un período de duelo,
puede ser ataraxia o resiliencia adecuada;
para usos prácticos, puede ser un trámite, una diversión;
puede ser una adicción a algo o una devoción a alguien.
gatts